«Como un prisionero dentro de un pozo oscuro y profundo no sé quién soy ni lo que me espera. Lo único que está claro es que, en esta lucha cruel y tenaz con el diablo, lo importante es salir victorioso. Así materia y espíritu se fundirán en perfecta armonía y el reinado de la voluntad universal comenzará».
Antón Chéjov, La gaviota.