Edvard Munch, Madonna. 1894-1895. Galería Nacional de Noruega.
«La noche, cada noche
se queda en la alfombrilla,
apuro otro gauloise, otro café,
me quedo como muerta y me disfruto.
Un rayo de sol frota mi espalda
como un chico trasnochado y rencoroso.
Esa es la luz que vuelve del festín,
la perra luz del día».
Violeta C. Rangel. La posesión del humo.